maneras De vivir





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           Si farcias del carordias, no remueldas las leporcias (J. Perich)

miércoles, diciembre 20, 2006

Lecciones de inglés (II)

Gomaespuminglis:
Guan:

Chu:


Para seguir repasando:
Lecciones de inglés (I)

martes, diciembre 19, 2006

Una vida de retrete

Suelo escribir sobre cosas que me pide el cuerpo. En esta ocasión lo haré sobre algo que me pide la conciencia. Me refiero al fallecimiento de Augusto Pinochet, un criminal que tuvo la suerte de que la muerte le visitase en cama, como si se tratase de la rutinaria visita de una aburrida enfermera a cuyo tacto notarial le hubiese confiado la familia la sutil delicadeza de cerrarle los párpados a un tipo que tendría que haber muerto de otro modo, tal vez como murió Musolini, cuyo cadáver fue colgado de las patas en una gasolinera después de haber sido arrastrado como una estera por el empedrado de las calles, o como sucumbió Adolf Hitler, que se quitó la vida en el bunker del Reichstag seguramente porque su soberbia de criminal no le permitía afrontar el bochorno histórico de un juicio del que con toda seguridad habría salido a hombros del implacable pelotón de fusilamiento. Pinochet murió en cama y de un fallo coronario, acurrucado entre los suyos, que sabían que su cadáver era el único sitio en el que podría esconderse impunemente alguien como él. Hay quien se conforma con la posibilidad de que el criminal chileno sea algún día severamente juzgado por la Historia. ¡Bobadas! La Historia no causa el dolor que Pinochet se merecía haber sentido en vida. No es admisible que los jueces deleguen sus funciones en la Historia, cuya jurisdicción es siempre lenta y caprichosa, de modo que en sus bandazos puede un hombre ser mártir hoy y tirano mañana. A Pinochet tendrían que haberle apretado las tuercas en vida hasta hacerle sentir en los huevos, como si fuesen espuelas, los prendedores de las condecoraciones que blindaban el pecho de su cadáver en el momento en el que su ayuda de cámara le puso al difunto toda aquella ferretería castrense con la que mismo parecía la odiosa publicidad de un perista. Pero el muy hijo de perra tuvo la suerte de morir en cama, caliente y rodeado de los suyos, como si aun se pudiese permitir el gesto arrogante y marcial de presidir su propio duelo. Después se consintió que el Ejército le tributasen los máximos honores en una bochornosa ceremonia que no hace sino empobrecer la dignidad de los militares que le rindieron pleitesía a un tipo que por su trayectoria sólo se merecía la suerte de ser enterrado en el cadáver de un cerdo, una vez que, previo soborno, se hubiese obtenido el permiso del bicho.
Por lo visto, la familia dispuso la cremación de sus restos mortales, con lo cual va a resultar que si sueltan el polvo en el paisaje, la muerte de Pinochet no nos va a suponer un alivio sicológico sin causar al mismo tiempo un incómodo impacto ambiental. Personalmente me trae sin cuidado cual sea el destino de los restos del dictador chileno, aunque me preocupa que si arrojan sus cenizas al mar, pueda encontrarme su mirada en los ojos apátridas de cualquier abadejo.
Estoy bien lejos de la indulgencia con la que acogió Manuel Fraga la noticia de la muerte de un fulano a quien el ex presidente de la Xunta sólo le reprocha la eventualidad de haber cometido "algún exceso". A mi me parece que el único exceso inocuo de la vida de Pinochet fue el confortable exceso de morir en cama sin haber sentido en la memoria de su carne el doloroso y sangrante recuerdo de la carne de sus millares de víctimas. Que Manuel Fraga califique de "algún exceso" la matanza hecha por Pinochet sólo se puede explicar si se acepta que, a cierta edad y en determinados personajes, la decencia sólo puede ser considerada un surrealista achaque de la vejez. Nadie se merece a un tipo como Augusto Pinochet. Nadie, ni siquiera los gusanos, porque sólo los gusanos ciegos se atreverían a comer el cadáver de alguien así sin abrirse a arcadas. Por suerte para ellos, el cuerpo de Pinochet ha sido reducido a cenizas. Y con otro poco de suerte, el polvo caqui del tirano podrían bebérselo los suyos confundido durante la sobremesa con el café soluble. Y entonces, muchacho, entonces Pinochet acabaría entre las heces en un retrete, que es una cosa de la que siempre careció la Historia, seguramente porque la Historia, amigo mío, le hace siempre a los criminales el favor de convertir su mierda en legajos...

José Luis Alvite - Faro de Vigo
14 de Diciembre de 2006

viernes, diciembre 15, 2006

Recordando

Pues va a ser verdad que nos hacemos viejos... ¡Lo que ha llovido! ¡Lo que queda por llover!

Algunas canciones de cuando nos mozeábamos:

Rosendo - Loco por incordiar

Los miles de veces que habré escuchado esta canción... ¡Buenos recuerdos!

Rosendo - Agradecido

El maestro... Genial, como siempre. Otro clasicazo.

Los Suaves - Dolores se llamaba Lola

Canción mítica de un grupo mítico. ¡Qué pelos!

Los Suaves - Peligrosa María / Frankenstein

¡Siempre suaves!

Barricada - En blanco y negro




Platero y Tú - El roce de tu cuerpo

Fito también se ha hecho mayor...

091 - Qué fué del siglo XX

Recuerdo escuchar esta canción junto a Dario, hace ya unos pocos años, al socaire de una cerveza y buena conversación. Dedicada a tí, amigo, siempre te recordaré...

sábado, diciembre 09, 2006

Publicidad

Aunque no es la publicidad un tema que me apasione, de vez en cuando aparece entre montones de mierda un anuncio de televisión que, al menos, tiene un toque original. No es que crea que éste sea el mejor anuncio de la historia de la televisión, pero es bastante mejor que la mayoría de los programas en cuyas pausas publicitarias se exhibe. El tema de las descargas por internet a modo de coña:



Tampoco soy aficionado a los videojuegos (esto empieza a no tener ningún sentido), pero en la publicidad de éste, me llamó la atención la extraña mezcla entre una música tranquila y elegante y unas violentas imágenes del videojuego en cuestión:



Por cierto, la música de este anuncio es una versión hecha por Gary Jules de Mad World de Tears for Fears, hecha para la película Donnie Darko. Esta es:



Y, como extra, este anuncio que descubrí recientemente en youtube, protagonizado por Homer Simpson. Anuncio de Mastercard, emitido únicamente durante la final de la Superbowl en 2004.

miércoles, diciembre 06, 2006

Constitución

Día de fiesta: nuestra cosntitución tiene ya 28 añitos.

Artículo 47
Todos los españoles tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada. Los poderes públicos promoverán las condiciones necesarias y establecerán las normas pertinentes para hacer efectivo este derecho, regulando la utilización del suelo de acuerdo con el interés general para impedir la especulación. La comunidad participará en las plusvalías que genere la acción urbanística de los entes públicos.

Pues eso... ¡A celebrarlo!

martes, diciembre 05, 2006

Pinochet

Según las ultimas noticias, la salud de Pinochet se mantiene estable: Tan cabrón como siempre.